Cómo prevenir las plagas de moho

El moho se da con mayor probabilidad cuando se presenta una combinación de factores determinados que afectan a la humedad, temperatura y los nutrientes del sustrato. Dado que muchos edificios modernos utilizan productos que aumentan la probabilidad de moho (por ejemplo, productos a base de papel y madera), los casos reportados han aumentado en los últimos años. A pesar de décadas de esfuerzos intensivos de investigación para prevenir el moho, los edificios modernos continúan sufriendo las plagas de moho. La razón principal es que las regulaciones prescriptivas actuales se centran únicamente en el control de la humedad relativa. Sin embargo, investigaciones recientes han demostrado que la aparición de moho está influenciada por una multitud de parámetros con interacciones físicas complejas, no reduciéndose sólo a la humedad. El conjunto de parámetros relevantes del edificio incluye las propiedades físicas de los componentes del edificio, los aspectos del uso del edificio, ciertos materiales, el comportamiento de los ocupantes, el régimen de limpieza, los componentes del sistema HVAC (calefacción, ventilación y aire acondicionado) y su funcionamiento, entre otros. El moho ocurre principalmente como resultado de una combinación imprevista de unos parámetros de construcción.

Medidas naturales

Educarse sobre los signos y síntomas del moho es una de las mejores acciones preventivas que puedes tomar. La humedad persistente y el moho van de la mano. El moho es un organismo muy oportunista que rápidamente echará raíces donde sea que las condiciones sean adecuadas. No es sorprendente que las áreas alrededor de tuberías y conexiones de plomería sean altamente vulnerables.

La prevención de moho es parte del mantenimiento regular que deben realizar los propietarios. Muchos especialistas recomiendan lo siguiente cuando se trata de la prevención del moho:

Tapar fugas de agua

Para comenzar tu guerra contra el moho, inspecciona la tubería en cualquier lugar que sea visible: debajo de fregaderos, sótanos o espacios de acceso, etc. Busca fugas, sellos defectuosos y grietas. Luego toma medidas para corregir los problemas, incluso si actualmente no hay signos de crecimiento de moho. Si hay humedad, habrá moho, tarde o temprano. Controlar el flujo de agua en tu hogar es esencial para mantener alejado el moho. Sellar las grietas, asegurarse de que las ventanas se cierren correctamente y volver a embaldosar los techos una vez que comienzan a superar su promedio de vida útil son factores importantes para mantener el interior de tu hogar seco y sin moho.

Haz chequeos periódicos

Esta es la clave. La gente a menudo hace una inspección, se ocupa de los problemas y luego se olvida de ellos para siempre. Desafortunadamente, como todos los sistemas mecánicos, la plomería envejece. Los sellados que están bien hoy pueden estar fallando mañana, o la próxima semana, o el próximo mes. La revisión de la plomería a intervalos regulares evitará que te pille desprevenido una infestación de moho.

Limpiar regularmente

Ya sea tú mismo o contratando un servicio de limpieza, debes asegurarte de que toda su casa se limpie de manera regular y completa. Este es un paso crítico para detectar el moho en una etapa temprana y evitar que encuentre una superficie adecuada en la que extenderse. La limpieza regular priva al moho de una fuente de alimento, frena la humedad y, lo que es aún más importante, la elimina. No permitas que se acumulen suciedad y escombros, especialmente en áreas cerradas y húmedas. Airea las telas y mantén los suelos limpios y fregados. Asegúrate de que las duchas, los lavamanos y las bañeras estén enjuagados y secos.

Mantenlo seco

Reduce la humedad ambiental a través de la ventilación y deshumidificadores. Reduce la posibilidad de que crezca moho en lugares donde la condensación se produce en superficies frías. Aísla estos lugares y mantén seco tu hogar.

Desinfectar

Asegúrate de matar cualquier evidencia de moho antes de que se expanda. Revisa rutinariamente las áreas que presentan problemas potenciales, y no tengas miedo de usar una solución de lejía o vinagre.

Usa deshumidificador

Si bien no forma parte del sistema de tuberías, un deshumidificador, ya sea independiente o como un componente de tu sistema de aire acondicionado, puede ayudar a mantener las áreas alrededor de tu plomería más secas y, por consiguiente, libres de moho.

Diseño con prevención de moho en mente

Por ejemplo, si estás renovando un baño, usar un lavabo con pedestal en lugar de un gabinete cerrado puede proporcionar más flujo de aire alrededor de la tubería y evitar que se desarrollen problemas.

Probar y mejorar el flujo de aire

Si es posible, haz esfuerzos para mejorar el flujo de aire en tu hogar. Las habitaciones cerradas y sin ventilación son las más adecuadas para el crecimiento de moho, por lo que abrir ventanas y permitir el flujo de aire siempre ayudará a proteger contra el moho. Sin embargo, procura no dejar las ventanas abiertas permanentemente. Si el agua de lluvia entra por esas aberturas, puede provocar justo lo contrario creando humedades y, en última instancia, la aparición de moho y muchos otros problemas.

Cuanto más aire ingrese y salga de un baño, cocina u otro espacio donde haya plomería, las superficies se secarán más rápido y será más difícil que el moho se asiente. Instalar respiraderos y ventiladores es una inversión que se puede amortizar posteriormente previniendo la necesidad de una costosa reparación de las zonas afectadas por el moho.

El área alrededor de la plomería puede servir como válvula de entrada para una invasión orgánica. No solo el moho puede crecer allí, sino que las esporas que libera al aire facilitan el movimiento del moho a otras áreas de tu hogar. Resolver los problemas rápidamente y tomar otras medidas para garantizar que estos espacios permanezcan secos y bien ventilados puede ayudar a mantener tu hogar o negocio libre de moho y otras plagas.

Medidas químicas

Lejía

La lejía se puede usar en casi todas las especies de moho en interiores. Al entrar en contacto, ya sea con el moho, como con sus esporas, lo combate dejando una superficie desinfectada y resistente al crecimiento de moho en el futuro. Pero la lejía también tiene sus desventajas: solo se puede usar en materiales no porosos como azulejos, bañeras, vidrio y encimeras. No se recomienda para materiales porosos, ya que no puede penetrarlos y, por lo tanto, no entra en contacto con el moho que crece debajo de la superficie de materiales como la madera y los paneles de yeso. El uso de lejía en estos materiales matará el moho sobre la superficie, pero las raíces dentro del material permanecerán y el moho pronto volverá.

Bórax

Hay muchas ventajas al usar bórax para matar el moho. Para empezar, el bórax es un producto de limpieza natural y aunque es tóxico si lo tragas, el bórax no emite químicos ni vapores peligrosos como otros productos anti-moho. El bórax, un polvo mineral blanco, tiene un nivel de pH de aproximadamente 9 (el bicarbonato de sodio tiene un pH de 8,1 y el pH 7 es neutro) y una toxicidad baja.

El bórax se usa comúnmente como desodorizante, así como para limpiar inodoros y desagües. El bórax también se usa como insecticida, herbicida y fungicida y se puede mezclar con agua en una solución para matar y eliminar el moho, ya que es un inhibidor natural del moho. Puedes comprar bórax en supermercados, a un precio similar a la lejía, en la sección de lavandería.

Vinagre

El vinagre es un ácido suave que acaba con el 82% de las especies de moho. Esta falta de ‘’efectividad total’’, la compensa con las ventajas de ser natural y seguro. El vinagre no es tóxico y no emite vapores peligrosos como lo hace la lejía.

Amoníaco

Al igual que la lejía, el amoníaco eliminará el moho en superficies duras no porosas, como mostradores, vidrio o azulejos, pero no es efectivo para matar el moho que crece en materiales porosos como la madera o los paneles de yeso.

Otra desventaja de usar amoníaco es que es un químico tóxico. Asegúrate de nunca mezclar amoníaco con lejía porque el gas que generan cuando se combinan es muy tóxico. Además, aunque el amoníaco puede matar el moho de la superficie, el moho escondido y las esporas del moho muerto son todavía alergénicas, por lo que deberás asegurarte de eliminarlos después.

Peróxido de hidrógeno

El peróxido de hidrógeno mata el moho, ya que es antifúngico, antiviral y antibacteriano. El peróxido de hidrógeno es una buena alternativa a la lejía porque es seguro de usar y no daña el medio ambiente, ni deja residuos tóxicos ni produce gases tóxicos como lo hace ésta. El peróxido de hidrógeno mata el moho de manera efectiva en muchos materiales como ropa, suelos, accesorios de baño, paredes y artículos como electrodomésticos de cocina. Dado que el peróxido de hidrógeno es un agente blanqueador, también puede ayudar a atenuar las manchas que deja el moho. Realiza una prueba de peróxido de hidrógeno en el material que vas a limpiar para asegurarte de que no desvanezca los colores del material.

Saber cómo evitar que una infestación de moho se propague en tu hogar u oficina es muy importante. Mantener un ojo abierto para detectar signos de infestación y revisar regularmente las áreas que son propensas a sufrir una infestación de moho puede ayudarte mucho en la lucha contra el moho. Sin embargo, si no has logrado evitar la propagación de este y te encuentras con que debes enfrentar una plaga de moho, puedes visitar nuestro artículo relacionado sobre ‘’Cómo eliminar el moho’’ y aprender cómo deshacerse del moho, mediante el uso de diferentes tipos de productos, dependiendo del tipo de área infestada.